EL POLO RESISTIÓ
El titular de moda es la derrota del Polo  en la reciente elección de congreso, titular que se acompaña con notas  de poco disimulado regocijo. Algunos de nuestros votantes y afiliados  inician juicios para responsabilizar a alguien de la derrota y las  lágrimas no les dejan ver la realidad.
Lo cierto es que el Polo  aumentó el número de votantes, resistiendo una arremetida agresiva y  calumniosa, promovida desde el mismo solio presidencial, mediante la  cual se le acusa amañadamente de instrumento de las políticas del  Presidente Hugo Chavéz y de las aventuras extremistas de la guerrilla,  todo con el fin de confundir el relativamente escaso voto de opinión. La  embestida va desde las temerarias acusaciones del procurador Ordoñez,  hasta los informes periodísticos, aparentemente neutrales y cívicos,  sobre el tránsito bogotano, donde se apalea al Polo, igual si se  encuentra otro hueco en las calles, que si se cierra la vía para  pavimentarlo.
El uribismo le cobra al Polo el destape, entre  otros asuntos, de Agro Ingreso Seguro, de los negocios de los hijos del  ejecutivo, de las iniquidades de la apertura y los TLC, de las  violaciones de los derechos humanos, de la antinacional concesión de  bases a los gringos, del parauribismo, del saqueo imperialista de  nuestros recursos naturales, y, por sobre todo, de la dictadura  promovida con el referendo reeleccionista y de su escabroso proceso de  aprobación. 
Lo cierto es que el Polo elevó su votación y destacó  a uno de sus candidatos en el podio de los más votados. Pero, ¿cómo  explicar el contraste entre el incremento de votantes y la reducción de  escaños en el congreso? Es Indudable que la votación del uribismo se  incrementó notablemente, en comparación con la jornada electoral de hace  un cuatrenio, lo cual altera las cifras repartidoras, los umbrales y  demás cortapisas, que reducen proporcionalmente la representación de las  minorías. 
No nos pueden decir que la U y el partido conservador  conquistaron más electores, convenciéndolos de las bondades de importar  maíz, trigo, algodón y hasta café; o de los beneficios del sistema de  salud, hoy tenebrosamente perfeccionado con los decretos de la  emergencia social; o de lo conveniente de la carestía de los  combustibles, gracias a los enormes impuestos indirectos; o de las  ventajas del empleo y el subempleo; o de las virtudes de la desnutrición  infantil. No. La votación de los dos principales partidos uribistas  aumentó gracias al clientelismo desaforado que administra los carnets  del Sisben; a la asignación de los ínfimos pero numerosos auxilios de  Familias en Acción; a la presión sobre los trabajadores contratados como  si fueran empresas con todo y RUT, y demás mecanismos con los que se  subordina a las crecientes capas pobres y miserables de la población. La  Misión de Observación Electoral, MOE, denuncia que, a estas prácticas  de por si corruptas, se sumaron la compra descarada de votos, el ingreso  de dineros de discutible procedencia, los carruseles con el tarjetón,  el trasteo de votantes, la alteración de las cuentas en los escrutinios y  hasta las amenazas físicas sobre la oposición y el electorado.
El  Polo soportó la arremetida con donaire, cuenta con 900.000 electores y  con un vocero en el senado aprestigiado y con gran aceptación dentro de  los sectores más avanzados de la sociedad, con una bancada muy capaz de  seguir en la brega para desnudar al uribismo sin Uribe y continuar en la  lucha por construir una Colombia con paz, soberanía y democracia.
Juan Ahumada Farietta.
sábado, 20 de marzo de 2010
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